Lilypie First Birthday tickers
Hacernos eco de ese papel imprescindible de madres y padres es desempolvar nuestros propios sentimientos del niño/a que fuimos. Sentirlo es la base del cambio. Y la reivindicación es fundamentar la felicidad de la infancia, su armonía como personas, más en contacto en nuestra relación ecológica en el mundo. Al fin y al cabo, es el primer ecosistema al que tenemos que proporcionar cuidado, el de la crianza responsable.
Òscar Llago i Giménez

viernes, 24 de diciembre de 2010

Ya llegamos a los 10 meses

¡Ya llegamos a 10 meses!!

Nunca el tiempo me pasó tan rápido como desde que convivo con Nicole, las horas, los días, las semanas, los meses vuelan...

También aunque a veces es duro por cuánto es cansador nunca mis momentos, mi vida tuvo más sentido que ahora en mi tarea de hacer de mamá de Nicole.

En los momentos duros, de cansancio, cuando dormimos poco o Nicole se despierta muchas veces y no tengo tiempo para mi le digo a Gianluca "ni en la peor de las pesadillas hubiera imaginado que la tarea de hacer de mamá es tan dura".
Como contrapartida existen tantos, tatísimos momentos en que el alma se me ilumina solo con observar ese ser tan espectacular que es mi hija (todavía no me acostumbro a estas palabras)...

Como la vida...ni todo es rosa ni todo es espinas...ser mamá es rosas y espinas...

Aquí comparto dos videitos, son de los 9 meses, deleitense!!! (babosa yo???)



jueves, 9 de diciembre de 2010

Una marcia in più



En Argentina solemos decir que los chicos de 'ahora' son mas vivos, en Italia para expresar la misma idea dicen 'I bambini adesso hanno una marcia in più' (los chicos de ahora tienen un cambio más).

Yo no creo que los chicos de 'ahora' tengan un cambio más o sean mas vivos que los chicos de 'antes', creo que lo que tienen mas es la libertad para experimentar el mundo que los rodea y menos represión de su curiosidad. Al menos es una tendencia que veo en la mayoría de mis amigas con hijos, en los programas sobre niños en la tele, en los films y en algunos blogs que leo.

Dar libertad tiene su precio, muchas veces comporta fatiga sobre la fatiga, por ejemplo sería mas facil reprimir a Nicole cuando la baño para que no moje el piso en vez de dejarla chapucear feliz y que media bañadera termine en el piso y todo el baño mojado. O cuando comemos que la sentamos entre nosotros y quiere tocar la comida de nuestros platos reprimirla sería mas facil que permitir que experimente textura, formas, consistencias, olores controlando que no se lo lleve a la boca y luego tener que limpiarla, cambiarle la ropa, limpiar sillita, mesa y piso.

La recompensa de dar libertad es el disfrute que nos da el observala descubrir el mundo y la consecuencia, pienso, es la viveza, esa marcha de más que dicen que tienen los chicos ahora.

Miren si no...







Y ahora un videito